En Margarita no tenemos nada parecido a la Acrópolis o el Partenón, pero, a cambio, en materia de funcionarios corruptos nos ponemos de tú a tú con los griegos y con cualquier otra región, por más clásica o antigua que pueda ser.
“Tras el museo de la Acrópolis, la casa del ministro corrupto se ha convertido desgraciadamente en el mayor sitio de atracción aquí”, comenta una joven ateniense desde la conocida calle, considerada como una de las zonas más costosas de Atenas.
Desde luego el espectáculo sería más interesante si el funcionario peculador estuviera a la vista, sentado en un jardín o asomado a la ventana y los mirones pudieran admirarle detalles como lentes oscuros de moda o el reloj de lujo.
La situación de Grecia es digna de ser tomada en cuenta por los margariteños, que no en balde somos la Nueva Esparta y entre nuestras poblaciones contamos con Juan Griego, uno de los sitios más hermosos de la Isla.
En Margarita no tenemos nada parecido a la Acrópolis o el Partenón, pero, a cambio, en materia de funcionarios corruptos nos ponemos de tú a tú con los griegos y con cualquier otra región, por más clásica o antigua que pueda ser.
Lo que nos falta es organizar unas giras turísticas que incluyan las casas o propiedades de los corruptos residentes en nuestra principal ínsula y con ello podríamos matar de envidia a los arubanos y a los curazoleños, donde los funcionarios deshonestos no llaman la atención de nadie.
En la Antilla venezolana abundan los sitios vinculados al tráfico de influencias, ya sean mansiones, hoteles, tiendas y edificaciones diversas.
Uno de los atractivos que podría captar más gente es el llamado ‘bunker’ del capo de la isla, donde es vox populi que tiene cuerdas de gallos de riña en corrales de postín, con aire acondicionado y ambiente musical. Además se cree que ahí conserva sus colecciones de costosos zapatos y relojes que harían babear al propio Manuel Rosales.
Otros sitios de interés se vinculan al exgobernador Ávila Vivas, a diversos banqueros delincuentes y múltiples exministros que alternan entre Margarita y Miami para despistar a los cobradores engorilados.
El último grito de la moda en Grecia consiste en un recorrido que incluye como atractivo principal una visita a la parte exterior de la casa del exministro de la defensa, Akis Tsochatzopulos, actualmente preso por corrupción administrativa.
“Tras el museo de la Acrópolis, la casa del ministro corrupto se ha convertido desgraciadamente en el mayor sitio de atracción aquí”, comenta una joven ateniense desde la conocida calle, considerada como una de las zonas más costosas de Atenas.
Desde luego el espectáculo sería más interesante si el funcionario peculador estuviera a la vista, sentado en un jardín o asomado a la ventana y los mirones pudieran admirarle detalles como lentes oscuros de moda o el reloj de lujo.
La situación de Grecia es digna de ser tomada en cuenta por los margariteños, que no en balde somos la Nueva Esparta y entre nuestras poblaciones contamos con Juan Griego, uno de los sitios más hermosos de la Isla.
En Margarita no tenemos nada parecido a la Acrópolis o el Partenón, pero, a cambio, en materia de funcionarios corruptos nos ponemos de tú a tú con los griegos y con cualquier otra región, por más clásica o antigua que pueda ser.
Lo que nos falta es organizar unas giras turísticas que incluyan las casas o propiedades de los corruptos residentes en nuestra principal ínsula y con ello podríamos matar de envidia a los arubanos y a los curazoleños, donde los funcionarios deshonestos no llaman la atención de nadie.
En la Antilla venezolana abundan los sitios vinculados al tráfico de influencias, ya sean mansiones, hoteles, tiendas y edificaciones diversas.
Uno de los atractivos que podría captar más gente es el llamado ‘bunker’ del capo de la isla, donde es vox populi que tiene cuerdas de gallos de riña en corrales de postín, con aire acondicionado y ambiente musical. Además se cree que ahí conserva sus colecciones de costosos zapatos y relojes que harían babear al propio Manuel Rosales.
Otros sitios de interés se vinculan al exgobernador Ávila Vivas, a diversos banqueros delincuentes y múltiples exministros que alternan entre Margarita y Miami para despistar a los cobradores engorilados.
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