La comunidad fue muy receptiva durante la jornada del Hospital Luis Ortega, pese a que aún hay mitos y leyendas sobre posibles efectos negativos de ese gesto de ayuda al prójimo.
El personal de Banco de Sangre estuvo de fiesta. Con sombreros de cogollo y una sonrisa recibieron a las personas que voluntariamente asistieron al Hospital Luis Ortega de Porlamar a donar sangre.
El 14 de junio se celebró, como todos los años, el Día Mundial del Donante de Sangre, establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El servicio del hospital porlamarenses organizó la actividad para fomentar la participación de la ciudadanía y bajo el lema “Dar sangre hoy es dar vida mañana” aplaudieron la voluntad de aquellos que acudieron.
La coordinadora del servicio, Normelis Carreño, dijo que abrieron las puertas desde las 7.00 am., para atender a la ciudadanía, que en su mayoría asistió a donar sangre por reposición, cuando algún familiar o amigo va a ser intervenido quirúrgicamente.
Carreño destacó que la propuesta del día del donante de sangre es entregar vida sin recibir nada a cambio, y en la actualidad el porcentaje de personas que visita el servicio con una actitud altruista es muy inferior al que asiste para ayudar a un conocido.
Según la jefa del servicio de Banco de Sangre, Luisa Narváez, la comunidad siempre es receptiva a la hora de donar sangre, pese a que aun hay mitos sobre los posibles efectos negativos que genera esta acción social. “Todos lo que vienen a donar son los héroes de los pacientes”, indicó.
Pedro Vásquez es donante hace dos años y uno de los casos de ciudadanos responsables que acuden voluntariamente. Para él esta acción representa un aliento de vida a aquellos que sufren accidentes o deben someterse a una operación.
Vásquez, igual que el personal del servicio del HLO, invita a la comunidad a ser más activa y asistir al banco como donante, porque si no hay sangre en las reservas del centro de salud se ariesga la vida de cientos de pacientes.
Requisitos
Para donar sangre solo se deben seguir ciertas recomendaciones básicas: tener más de 18 años, pesar más de 50 kg, tener buena salud, no estar en ayunas, no haber donado sangre en los últimos dos meses; se recogen los datos personales del donante, se le toma la tensión arterial y el pulso, además de una prueba de hemoglobina para detectar si tiene anemia. Se debe tener en cuenta que los hombres pueden donar cuatro veces al año y las mujeres tres.
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